Entre el lunes 31 de marzo y el domingo 6 de abril se celebrará la 14 edición de CINHOMO, la Muestra Internacional de Cine LGBT .
El equipo de voluntarios que trabajapara sacar adelante la Muestra, sigue primando el objetivo de ofrecer cine de calidad a la vez que reivindicar la igualdad social independientemente de la orientación o la identidad sexual.
Continuan las secciones tradicionales, entre las que destaca la Sección Oficial de Largometrajes y Cortometrajes de Ficción
Igualmente es destacable el Ciclo Documental de Derechos Humanos, en el que nos acercamos a diversas realidades en el panorama internacional, y diversas formas de vivir la diferencia.
La cita tendrá lugar en las salas del cine Casablanca en Valladolid.
Video promocional de la 14ª Muestra de Cine Internacional LGBT «Cinhomo 2014», que se celebrará del 31 de Marzo al 6 de Abril en los Cines Casablanca de Valladolid.
Imágenes de Laurence Anyways cortesia de AVALON.
Mi Goya sin duda es para una película que vi ayer, se llama STOCKHOLM y la firma Rodrigo Sorogoyen. 2013. Triunfó en el pasado festival de cine español de Málaga y todo el equipo ha trabajado en cooperativa, parte ha sido financiada a través de Verkami.
Se trata de una película pequeña que a base de un guión sólido va creciendo con frescura. En la primera escena nos ponen al día de la manera de ser de nuestro protagonista, durante el desarrollo de la historia trata de convencernos de que esa descripción es falsa y en la última parte la historia da un giro, nuestra pareja sufre una transformación y nosotros percibimos que se les ha hinchado la piel y no son los mismos.
Cuando una historia te avisa en la primera escena, te engaña en el medio y te da un giro en la última parte para volver al principio, tiene todos los ingredientes para ser una buena película de suspense, pero en este caso se trata de una comedia romántica, con una pareja de jóvenes con mucho gancho que se bastan ellos solitos para mantener la historia alta, apoyados por unos estupendos diálogos y un director que les quiere a los dos por igual.
Finalmente la que puede considerarse como una de las sorpresas cinematográficas del año, no se ha llevado ninguna estatutilla después de las 4 nominaciones que había logrado para los Oscar. Mejor película, director,actriz principal y guión adaptado.
Un debutante director Benh Zeitlin, aprovecha la excusa de «la niñez», para en un maravilloso coctel de ideas, hablar de mucho más, prácticamente de todo. De fuertes y débiles, de un mundo marginal y del cambio climático, de las relaciones paterno filiales, de la pertenencia a un grupo, de sentimientos como el miedo, la valentía, el amor o la amistad.
La acción de este film se desarrolla en «La Bañera», un lugar ficticioy desolador situado en algún punto entre las riveras del río Mississippí, en Louisiana (EEUU). Recordando al escenario que dejó el paso del huracán Katrina por Nueva Orleans.
Una gran tormenta da un giro a los acontecimientos, la que hace que a veces «algo se rompa en pedacitos tan pequeños que es imposible que vuelva a estar en su sitio, a encajar en el mundo, por mucho que se intente arreglar».
Entre metáforas, realismo mágico y bastante crudeza, OuvenzhanéWallis (Hushpuppy), interpreta a una niña de seis años con el pelo rebelde y ensortijado, en una actuación tan salvaje como memorable. Se descubre un pequeño portento de la naturaleza, que ha aspirado a un Oscar con tan sólo nueve años.
Una extraordinaria película que pudimos disfrutar en nuestro querido y maravilloso cine Groucho en Santander.
Esta película se debería haber rodado a continuación de «el pisito» y «el cochecito» en los años 60, para completar la trilogía de la España negra, escrita por Rafael Azcona y dirigida por Marco Ferreri.
José Luis García sánchez y David Trueba admiradores y colaboradores del genial guionista Rafael Azcona, han querido hacer esta película como si estuviera filmada justo después de las otras dos, riguroso blanco y negro y largos planos secuencia que siguen por una casa a esos personajes patéticos, interpretados por actores de nuestra época que seguro se han empachado de ver las grandes películas de Berlanga para preparar sus personajes.
Lo que más me sorprende de esa época es la manera de hablar de cosas morbosas como si pareciera lo más natural del mundo y esa doble moral tan consentida que todos hemos conocido y algo hemos heredado. Tengo que decir que a mí ese humor negrísimo que destila la película me hizo mucha gracia, pero a la que siempre viene conmigo le produjo tristeza.
Al no tener dinero para promoción, su director va por las ciudades españolas con la cinta debajo del brazo, intentando hacer estrenos personalizados en cada ciudad, un punto añadido a ese toque artesano que tiene la película.
El estreno fue en el pasado festival de cine europeo de Sevilla con malas críticas por parte de la prensa. Personalmente perdono algún exceso de la película e incluso que no funcione alguno de los muchos personajes que nos retrata.
No sé si vais a estar de mi lado o del de la prensa, pero por curiosa creo que debería verla todo amante del cine.
Cartel del 49 Festival Internacional de Cine de Gijón
Dos ediciones visitando este festival y ya se ha convertido en la horma de mi zapato. Es un festival informal, cercano e integrado en una bella ciudad en la que todo pilla a mano. Sus entradas baratas atraen a espectadores de todas las edades, ávidos de ver un cine arriesgado, en estos tiempos en que lo que funciona es lo corto y masticado.
A parte de la Sección Oficial, tiene otras secciones con nombres muy bonitos en Asturiano, RELLUMES (destellos) de otros festivales, ESBILLA (separar por ejemplo las legumbres malas de las buenas) representa la sección que elige los garbanzos negros de la cosecha anual y LLENDES (los lados) esas películas, documentales y videoarte que se quedan por las lindes del camino.
Para desengrasar la cabeza después de tanto cine, cuando termina la última sesión del teatro Jovellanos, hay concierto gratis, dos bandas diarias con los más variados estilos. En los días que estuve yo pude escuchar Soul, Rock and Roll, New Punk, Indi, Garage y Blues.
A pesar de cumplir 49 ediciones, fuera de Asturias no es un festival muy conocido y mucha gente todavía lo confunde con la Semana Negra. En estos tiempos de recortes, tenemos que reivindicar que se sigan manteniendo estos eventos, porque son una inversión de futuro muy rentable para la sociedad, forman gente abierta, que piensa y se pone en el lugar del otro.
Si tengo que elegir una película de esta edición, me quedo con L´APOLLONIDE. Bertrand Bonello. Francia (2011). Ambientada en 1900 en una casa de citas de lujo, la cámara recorre pausadamente todas las estancias de la casa con una elegancia, a veces claustrofóbica, que firmaría el mismísimo Visconti. En ese mundo secreto y esclavo, descubrimos la convivencia de esas mujeres, sus anhelos y la solidaridad entre ellas, como defensa ante las personas de clase alta que visitan la casa, huyendo de su mundo de apariencia, para sacar por un rato sus frustaciones y perversiones. En mi cabeza quedan esos momentos de la película tristes pero muy bellos en los que música de los setenta, ambienta perfectamente el principio del siglo XX.
SEMINCI 2011 Este año la cosecha de películas ha sido buena. Saliéndonos de la sección oficial, cabe destacar un ciclo de películas suecas actuales (2010/2011) en la que ha quedado constatado que la filmografía sueca goza de muy buena salud, trata temas muy diversos y se aleja de los viejos tópicos de cine lento que siempre habla de amargados que lo tienen todo.
La sección oficial ha estado llena de primeras películas, esto crea cantera y unos cuantos directores a los que seguir en años sucesivos, como pasó en su día con los belgas hermanos Dardenne o con el francés Robert Guediguian, directores consagrados que el festival siguió desde sus comienzos. Este año han venido al festival con dos grandes películas, los Dardenne con “EL NIÑO DE LA BICICLETA” que ya está en cartelera y Robert Guediguian con “LAS NIEVES DEL KILIMANJARO”, de próximo estreno.
“HASTA LA VISTA” Geoffrey Enthoven
La Espiga de Oro fue para “HASTA LA VISTA” Geoffrey Enthoven. Bélgica. Este premio posibilita que la película tenga distribución en España y podamos disfrutarla en los cines próximamente. Es una «road movie» de tres veinteañeros con un gran sentido del humor negro, un parapléjico, un chico que va en silla de ruedas por una enfermedad degenerativa y un ciego, juntos quieren hacer un viaje a España para perder la virginidad en un puticlub especializado en minusválidos. Es una comedia ágil, muy optimista y que se deja en casa los sentimentalismos, la película pasa de una situación muy divertida a dejarte la risa helada por una situación dramática.
"Clase abierta" de Fernando León de Aranoa
Por último quiero destacar la “clase abierta” que Fernando León de Aranoa impartió en la universidad con motivo del 15 aniversario del estreno de su primera película “Familia” en la Seminci. Nos tuvo más de dos horas sin pestañear hablándonos del proceso de escritura, dirección, montaje y producción. Dice que él en sus películas se niega a poner “Una película de…” porque en una película trabajan 140 personas y él sólo es autor del Guión y Dirección. También dijo que un guionista tiene que tener la capacidad para sorprenderse (él lo llamaba extrañarse) con las cosas cotidianas, en el momento que pienses “esto ya me lo sé o esto ya lo he visto” corres grave peligro de acomodamiento. Yo creo que este comentario se puede acoplar al espectador de cine, a pesar de tener los ojos carbonizados por tanto audiovisual a nuestro alcance, hay que hacer un ejercicio constante por ver las cosas desde una mirada limpia de niño.
Por fin he podido conocer el festival de cine de Gijon y el flechazo ha sido instantaneo, tres días no dan para valorar un festival, pero me da la sensación que es cercano, hecho para el público (cine variado, videoarte, instalaciones, conciertos) y que las instituciones a la hora de financiar no ponen el impuesto «Te patrocino pero quiero glamour».
LA VIDA SUBLIME- Daniel Villamediana. (2010) Dentro del buen cine exhibido en Gijon, me sorprendió gratamente esta película del Vallisoletano Daniel Villamediana, emparentada en forma y estilo con la escuela catalana de José Luis Guerín (En Construcción) y compañía, unos cineastas que se obsesionan por inmortalizar el momento real y manejan a la perfección el salto de un lado a otro entre el documental y la ficción.
El protagonista de «La Vida Sublime» emprende un viaje desde el páramo castellano de Urueña hacia Andalucía, para revivir un viaje que hizo su abuelo en los años 40 y que al no estar documentado podría tratarse de una leyenda, esto lo emparenta con el guión no filmado de la segunda parte de «El sur» de Victor Érice, donde la niña ya adolescente se supone empieza un viaje desde Castilla al sur como nuestro protagonista. En el camino conoceremos un poco el carácter castellano, la luz de andalucía y sobre todo la obsesión del protagonista por revivir los acontecimientos de la historia de su abuelo, para que quede constancia documental de la realidad y liberar su cabeza de la leyenda.
TRAILER – LA VIDA SUBLIME- Daniel Villamediana. (2010)
Próximo a cumplir 90 años de edad (el 4 de abril para ser exactos), nos ha dejado uno de los autores más interesantes y entrañables del cine francés de todos los tiempos. Jean-Marie Maurice Schérer o Éric Rohmer (seudónimo que adoptó por sus ídolos Erich von Stroheim y el escritor Sax Rohmer), fue editor de la revista Cahiers du cinéma a fines de los años ‘50, pero al igual que otros compañeros suyos en la revista, fue gestando la idea de llevar a la práctica todas las teorías expuestas por su mentor André Bazin. La nouvelle vague como movimiento tuvo una vida bastante corta, pero dio inicio a un puñado de carreras excepcionales como las de este hermano mayor, activo e inquieto hasta estos últimos años.
La obra de Rohmer ha sido catalogada de distintas formas. Cineasta de la palabra, o de visión naturalista. En sus películas, al menos con más claridad desde La coleccionista, se define una observación de la realidad de estructura sutil, tratando de aparentar lo establecido como obra del azar. Se dice también que es un cineasta de espíritu joven, puesto que intelectuales o no, sus personajes transitan en un estado de búsqueda de lo maravilloso, donde más que una intriga, lo que valen son sus hallazgos y ritos durante los tiempos muertos. De ahí que muchas de sus películas estén ambientadas en temporadas de vacaciones, o en momentos reflexivos cuyo ritmo relajado lo simule muy bien.
Esos retazos epifánicos de la cotidianidad, que se inspiran en la obra rosselliniana más que en cualquier otra, conforman una obra personalisíma y bastante experimental, aunque lejana del hermetismo de otros ex colegas de la nueva ola como Godard o Rivette. Dentro de todo Éric deslizaba pequeños juegos de amor, celos, poses, pero también susurros y soledades, todos ellos tributarios de la literatura prerevolucionaria que tanto le fascinaba. Esa afición es la que también inspiraba su gusto por reunir las distintas etapas de su larga trayectoria en ciclos: “cuentos morales”; “comedias y proverbios”; “ciclo de estaciones”. Difícil decidirse totalmente por alguno de sus capítulos, ¿Mi noche con Maud? ¿La rodilla de Clara? ¿La mujer del aviador? ¿Las noches de la luna llena? Personalmente el recuerdo que me llevo es el de un autor tratando de captar “lo efímero y glorioso de la existencia”, pero sin nada de las aparentes pretensiones que podría imaginar uno ante una frase como esa. Basta solo con ver esa sucesión de imágenes en las que la vida al aire libre con gestos y palabras son intercambiados por habitaciones en las que los personajes se someten al silencio, al aburrimiento, a sus secretas esperanzas.
La coleccionista: No es el primero de sus cuentos morales, pero es el que define con mayor precisión todo lo que el autor irá ofreciendo a lo largo de su obra. Playas, una pasión amorosa, personajes autosatisfechos enfrentados a otra forma de ver la vida, la de la Haydee, una de las mujeres inolvidables del cine de Rohmer.
"Concejo abierto" 